Daniel El portero colombiano, que jugó los 90 minutos, salvó la igualdad de los italianos ante el Estrella Roja, en el Grupo C de la Liga de Campeones.
La tercera jornada futbolera en días laborales de septiembre ha estado marcada, como de costumbre, por las atajadas, golazos, jugadas y bloppers, entre otras cosas, que se vivieron en los diferentes lugares del mundo donde ha habido actividad.
Dicho de otra manera, representada por los hechos más llamativos que han derivado de la acción en las distintas competiciones locales como la Major League Soccer de Estados Unidos e internacionales como la Copa Conmebol Sudamericana, por mencionar algunas.
Uno de los sucesos que se presentó durante las últimas horas y que ha dado mucho de qué hablar en la prensa deportiva mundial es el protagonizado por David Ospina Ramírez durante el sorpresivo empate a ceros de la Società Sportiva Calcio Napoli (0-0) ante el Estrella Roja de Belgrado, en partido valido por la primera jornada del Grupo C de la UEFA Champions League.
El mítico Estadio «Rajko Mitić» (Pequeño Maracaná) vivió una noche de ensueño. Añeja, con sabor ochentero, cuando los equipos balcánicos se daban festivales por toda Europa y antes de que la Ley Bosman finiquitara su presencia en la élite continental.
Así recogió el testigo el aguerrido Estrella Roja, como si todo su tiempo se hubiera detenido en aquel mayo de 1991 cuando se proclamaron campeones de Europa en Bari con un equipo de ensueño. Un valioso punto sumó el equipo serbio ante el SSC Napoli, en el inicio de la Liga de Campeones.