El astro portugués, que se fue a Italia para ampliar su leyenda, se queda fuera de la carrera por la Champions y el Balón de Oro.
La histórica campaña del Ajax dejo en evidencia al Real Madrid y a Cristiano Ronaldo. Los merengues aseguraban no necesitar a su maximo goleador y CR7 presumía de ganar él solo la Champions League.
Los chicos holandeses se encargaron de desmentirlos a los dos tras eliminarlos en los octavos y en los cuartos, respectivamente. Quedó claro que tanto Cristiano como el Madrid se necesitaron mutuamente para ganar las últimas tres Ligas de Campeones.
El rostro de Ronaldo al final del partido lo decía todo. Triste, abatido y cabizbajo… él quería demostrarle al mundo que seguía siendo Míster Champions y no pudo. Mas allá de que marco los dos goles de la Juventus en la serie. Pero, lo que mas le duele al portugués es quedarse sin opciones de ganar el Balón de Oro.
Uno de los objetivos de Cristiano Ronaldo era recuperar el trono de mejor jugador del mundo. El nacido en Madeira sabía que ganar la Liga de Campeones con su nuevo equipo sería vital en sus aspiraciones. Sin embargo, el panorama cambia notablemente porque terminará la temporada con dos títulos locales: la Supercopa de Italia y la Serie A.
La Juventus hizo una importante inversión económica para incorporar a Cristiano Ronaldo el pasado verano. El club consideraba que era la pieza que le faltaba al equipo para dar el paso al frente definitivo para ganar la Champions, una competición que se le resiste desde hace 23 años.
Desde la temporada 2012-13 la Juventus ha caído dos veces en la final, tres en cuartos, una en octavos y otra en la fase de grupos. La maldición sigue viva y ni Cristiano ha sido capaz de acabar con ella. Un «Bajón de Oro» que explica los fracasos de Real Madrid, Juventus y Cristiano Ronaldo esta temporada.